El presidente Trump aprobó un nuevo proyecto de ley en el Senado con el objetivo de reducir los niveles legales de inmigración durante una década, una meta que Trump respaldó en la campaña electoral que representaría un cambio profundo en las políticas de inmigración estadounidenses que han estado vigentes durante medio siglo.
Trump apareció con los Senadores. Tom Cotton (Arkansas) y David Perdue (Ga.) En la Casa Blanca para desvelar una versión modificada de un proyecto de ley que los senadores introdujeron por primera vez en abril para reducir la inmigración a la mitad del actual nivel, que es de más de 1 millón de Green cards por año otorgando a los extranjeros residencia legal permanente en los Estados Unidos.
Los esbozos de la legislación reflejan los objetivos que Trump hizo en la campaña electoral, cuando argumentó que el rápido crecimiento de la inmigración durante el último medio siglo había perjudicado las oportunidades de empleo para los trabajadores estadounidenses y llevado a riesgos para la seguridad nacional. Trump se había reunido dos veces antes en la Casa Blanca con Cotton y Perdue para discutir los detalles de su legislación, la cual se titula Ley de Reforma de la Inmigración en Americana para el Empleo Fuerte (RAISE).
“Esta sería la reforma más significativa al sistema de inmigración en medio siglo”, dijo Trump, flanqueado por los senadores en la Sala Roosevelt. “Es una propuesta histórica y muy vital”.
La legislación marcaría un gran cambio en las leyes de inmigración de los Estados Unidos, que durante el último medio siglo han permitido que un número creciente de inmigrantes puedan venir al país para trabajar o unirse a familiares que ya viven legalmente aquí.
Para lograr las reducciones y crear lo que llaman un “sistema basado en el mérito”, Cotton y Perdue están apuntando a las tarjetas verdes para los miembros de la familia extendida de los ciudadanos estadounidenses y residentes legales permanentes, limitando tales vías para los niños y hermanos adultos. Los hijos menores y los cónyuges seguirían siendo elegibles para solicitar las tarjetas verdes.
Los senadores también proponen poner fin a una lotería de visados que ha otorgado 50.000 tarjetas verdes al año, principalmente a áreas del mundo que tradicionalmente no tienen tantos inmigrantes a los Estados Unidos, incluyendo a África. Y el proyecto de ley cubre los niveles de refugiados en 50.000 por año.
Bajo el proyecto de ley, el nuevo sistema de inmigración otorgaría puntos a los solicitantes de la tarjeta verde basados en factores tales como la habilidad en inglés, los niveles de educación y las ha